Relatos

En algún momento de la mañana, me empezó a entrar un hambre intensa. Así que habiendo dejado todo en orden aquí, me escape a una pequeña fonda aquí cerca..

Esta carta, la escribi hace muchos años.. alla por 1993. Dirigida a quien entonces compartia mi vida.

Muchas calamidades afligen a mi tío Francisco, pero una de ellas ocupa lugar prominente: la angustia de no poder recordar algo en un momento determinado. La mayor parte de las veces es un dato sin importancia, pero que al escapar momentaneamente de su memoria se convierte en una verdadera obsesión que le ahuyenta hasta el sueño.

Te prometi una historia esta noche. No es del tipo que esperabas encontrar, porque esta noche es aun mas especial. Es una historia sencilla: dos amantes de cientos de años. Ella lo descubrio sapo en un funeral. Despues con su amor infinito, lo...

Solo por hoy, me encuentro inmerso en pensamiento y acción, en un estado opositor a la aponia y a la ataraxia. Esta negación del placer catastemático me trae desde hace algunos dias, pero en especial desde ayer, rumiando y conteniendo un caudal de palabras, frases, ideas que de pronto se quedaron sin eco.

Desde pequeño fué introvertido. Quizás un caso de timidéz extrema, derivada de una madre sobreprotectora que siempre estuvo presente, en todo momento, a toda hora.. de manera agobiante. De ahi que optara (quizás su única opción) por el ensimismamiento.

Dormir, despertar, dormir de nuevo... despertar de nuevo? o seguir durmiendo? Sigo durmiendo, es esto un sueño o sueño que despierto?

En esta soledad autoimpuesta, el cuerpo ha aprovechado la calma y el sosiego para descansar y reponer energias..